Mensajes clave
Ante las interrupciones de los servicios de los centros debido al COVID-19, los proveedores de atención sanitaria, especialmente en los países de ingresos bajos y medios, deben esforzarse por mantener la continuidad de la atención de salud reproductiva a las mujeres y niñas como un servicio esencial.
Cuando los encuentros en persona son limitados, los proveedores de atención sanitaria deben adaptar la forma en que se prestan los servicios anticonceptivos utilizando la telesalud siempre que sea posible para el asesoramiento, la toma de decisiones compartida y la gestión de los efectos secundarios, y deben realizar ajustes en la provisión de métodos anticonceptivos para garantizar el acceso.
