FP2030 Sr. Asesora de Prácticas de Alto Impacto en Planificación Familiar, Laura Raney, y Joanna Skinner, Hope Hempstone, Christine Galavotti, Benedict Light, Michelle Weinberger y Lynn Van Lith.
La comunidad mundial de planificación familiar ha logrado avances significativos para que 120 millones más de mujeres y niñas utilicen anticonceptivos en 2020, aunque entramos en la próxima década con un largo camino por recorrer. Aunque sigue siendo necesario invertir en sistemas sanitarios y cadenas de suministro sólidos, el enfoque basado en la oferta dominante en la planificación familiar no aborda las barreras individuales, relacionales y sociales a las que se enfrentan las mujeres y las parejas para alcanzar sus intenciones reproductivas y el tamaño de familia deseado. Para superar estos obstáculos será necesario comprender mejor los factores que impulsan el comportamiento y el entorno social en el que se toman las decisiones de planificación familiar, y aumentar la inversión en el enfoque del cambio social y de comportamiento (CSC), de eficacia probada pero infrautilizado. Los autores defienden que un enfoque más intencionado de la ciencia del comportamiento humano en la planificación familiar puede ayudar a avanzar en la consecución de los objetivos globales, regionales y nacionales, al tiempo que reclaman una inversión estratégica y sostenida que refleje la importancia crítica y el impacto probado de los enfoques de CBS.