Las niñas casadas prematuramente son vulnerables a la violencia de pareja, la coacción sexual y la maternidad precoz. Más allá de los riesgos inmediatos para la salud física y mental, las niñas que se casan prematuramente quedan excluidas de la educación y de las oportunidades económicas. Estas consecuencias adversas para su salud, educación y medios de vida son inmensas y duraderas.
El creciente reconocimiento de los profundos perjuicios del matrimonio infantil ha impulsado a muchas organizaciones y gobiernos a introducir nuevas estrategias para frenar esta práctica. Estas estrategias han abarcado desde pequeños esfuerzos de prevención basados en la comunidad hasta reformas legales o políticas a gran escala. Debido a su éxito en la mitigación de la pobreza y la mejora de los resultados educativos y sanitarios, investigadores y profesionales han empezado a considerar las transferencias condicionadas de efectivo (TCE) como una posible estrategia para retrasar el matrimonio. Las TMC proporcionan dinero en efectivo como incentivo para cumplir ciertos criterios que se considera que tienen un impacto social positivo, como una mayor asistencia a la escuela o el uso de los servicios sanitarios. Los pocos programas de TCE que han tenido el objetivo explícito de retrasar la edad del matrimonio y han sido evaluados ofrecen pruebas dispares de su éxito.
El impacto en el matrimonio: Program Assessment of Conditional Cash Transfers (IMPACCT) del Centro Internacional de Investigación sobre la Mujer (ICRW) se suma a las pruebas existentes sobre las TMC como posible solución para retrasar la edad del matrimonio y mejorar las oportunidades de niñas y mujeres.
La sinopsis de la investigación de ICRW proporciona datos cuantitativos y cualitativos sobre el impacto del programa en la vida de las niñas. ICRW evaluó el programa de TCE Apni Beti Apna Dhan (Nuestras hijas, nuestra riqueza) para determinar si había tenido éxito una inventiva económica que proporcionaba a las hijas inscritas que reunían los requisitos necesarios un bono que se canjearía por 25.000 rupias si la chica seguía soltera a los 18 años. ICRW midió si era más probable que las niñas permanecieran solteras hasta los 18 años, si era más probable que permanecieran más tiempo en la escuela o que estuvieran estudiando actualmente, y si habían aumentado o no las aspiraciones de las niñas y de los padres para sus hijas.