La atención a la salud sexual y reproductiva abarca una amplia gama de servicios que garantizan que las personas puedan decidir si quieren tener hijos y cuándo, experimentar un embarazo y parto seguros, tener recién nacidos sanos y disfrutar de una vida sexual segura y satisfactoria. Estos servicios son inversiones importantes tanto porque mejoran el bienestar individual y permiten a las personas ejercer sus derechos sexuales y reproductivos, como porque tienen beneficios de gran alcance para las sociedades y para las generaciones futuras.
Este informe examina los servicios básicos que las mujeres necesitan y utilizan durante sus años reproductivos: servicios anticonceptivos, atención relacionada con el embarazo (incluida la atención sanitaria materna y los servicios de aborto), atención al recién nacido y tratamiento de las ITS. Identifica servicios que, de ampliarse y reforzarse, podrían mejorar la salud de las mujeres, sus parejas y sus hijos. Se centra en los países de renta baja y media (PRMB) y, al igual que los informes anteriores de Adding It Up, presenta la necesidad, las repercusiones y los costes asociados a la prestación de servicios según los niveles de atención definidos internacionalmente. El objetivo del informe es ilustrar a los gobiernos nacionales y locales, al sector privado y a los socios internacionales para el desarrollo sobre las inversiones necesarias para ampliar y mejorar los servicios de salud sexual y reproductiva, que son componentes esenciales de la atención sanitaria.